Archivo por meses: septiembre 2009


Oleiros utiliza a sus ciudadanos como protesta ante AESA

El Ayuntamiento de Oleiros, actualmente en litigio con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) por la disconformidad en las zonas de afección de las servidumbres aeronáuticas y acústicas del Plan Director del Aeropuerto de A Coruña, ha decidido utilizar a sus ciudadanos como medio de protesta y mediante la resolución 3.693/93 obliga a todos los que quieran tramitar licencia de construcción en este ayuntamiento a solicitar autorización a AESA.

El Decreto 584/1972, de 24 de febrero, de Servidumbres Aeronáuticas,  establece con claridad  que la solicitud de autorización a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea  deberá realizarse  en los casos siguientes:

  • Deberán solicitar la preceptiva autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea las personas naturales o jurídicas que pretendan construir, edificar o instalar sobre zonas afectas a servidumbres aeronáuticas de aeródromos, helipuertos o ayudas radioeléctricas a la navegación aérea.
  • todas aquellas personas naturales o jurídicas que pretendan construir, edificar o instalar algún obstáculo a la navegación aérea, es decir, que contenga algún elemento cuya altura se eleve más de cien metros sobre el terreno deberán comunicarlo a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea para que esta adopte las medidas oportunas.

El ayuntamiento, que es el encargado de indicar al ciudadano cuáles son las zonas afectas por las servidumbres aeronáuticas obliga a presentar la solicitud de autorización a AESA aunque la parcela donde pretendemos construir esté situada a kilómetros de la zona de afección, con lo cual el trámite de obtención de licencia que actualmente superaba los 6 meses de plazo, se verá incrementado en algunos meses más, ocasionando un importante prejuicio económico al que desee construir en este ayuntamiento.

Simplificándolo, es como si  cuando vas a solicitar licencia, te piden que sostengas una pancarta y hasta que les suban el sueldo a los funcionarios del ayuntamiento no te la tramita.


La desaparición de los colegios profesionales

Os imagináis una empresa donde el cliente esté obligado a comprar sin posibilidad de elección, donde el precio lo fija el vendedor según le interese y donde el producto no tenga ninguna garantía de calidad, el sueño de cualquier “empresario”, pues en eso se ha transformado actualmente el colegio de aparejadores y arquitectos técnicos.

Nacido de la agrupación de un colectivo con una idea de lucha por los intereses de sus miembros, brindado protección y defensa de la profesión que desempeñan, a la vez de facilitar su constante formación y actualización profesional.

Lejos quedan esas intenciones, actualmente, incentivados por ralentización del sector,  en lugar de reestructurarse y adaptarse a esta nueva etapa, la única forma de adaptarse a las nuevas condiciones consiste en exprimir económicamente a sus colegiados, y reducir drásticamente los pocos servicios hasta ahora nos ofrecían. Hace poco, en una carta se nos indicaba que estábamos pasando un periodo de “apretarse el cinturón”, yo me pregunto que es lo que entenderán nuestros representantes colegiales por apretarse el cinturón, o más bien, alrededor de que quieren apretarlo?.

Al igual que estructuras políticas de otros países han ido desapareciendo y adaptándose a sistemas democráticos, no perfectos pero más acertados, en mi humilde opinión, los colegios profesionales deberían haber desaparecido en su día cuando se liberalizaron los honorarios profesionales.