Archivo por meses: noviembre 2010


Carpintería con sistema de apertura corredera 1

Durante bastante tiempo las ventanas de apertura corredera estuvieron denostadas a favor de otro tipo de mecanismos, como el tan extendido oscilo-batiente. La razón principal, obviamente, tenía que ver con la imposibilidad de competir con ellos sobre todo en cuanto al tema de la estanqueidad al agua y la permeabilidad al aire, dado que el mecanismo de apertura oscilo-batiente consigue con sus juntas un cierre mucho más estanco e impermeable que el de las correderas. Además las correderas requerían de un mantenimiento, siendo conveniente la sustitución de las antiguas felpas cada cierto tiempo, cosa que generalmente no se hacía, con la consiguiente pérdida de propiedades con el paso del tiempo.

En la actualidad se ha mejorado considerablemente este aspecto al sustituirse las felpas por juntas de EPDM, caucho de etileno propileno dieno, un termopolímero elastómero que tiene buena resistencia a la abrasión y al desgaste. Se trata de un material con una buena resistencia a los agentes atmosféricos y a los productos químicos en general además de tener muy buenas propiedades impermeabilizantes, de hecho se usa habitualmente en impermeabilizaciones de cubiertas.

Otro de los inconvenientes que presentaban las correderas era la incomodidad del sistema de apertura en hojas de dimensiones importantes, dado el peso que se alcanza con los actuales sistemas de doble acristalamiento, lo cual se agravaba con el tiempo al no realizarse el debido mantenimiento. Este problema se ha solucionado actualmente con la aparición de dos sistemas de apertura corredera, ya plenamente establecidos en el mercado, como son la oscilo-paralela y la corredera elevable.

La mayoría de las casas comerciales de gama media-alta incorporan estos sistemas, con las debidas garantías de fabricación. Sirva como ejemplo la corredera GTi de Technal, una corredera elevable diseñada para realizar grandes cerramientos, que permite llegar a hojas de 2,5 x 2,5 metros, con versiones de doble y triple raíl, pudiéndose realizar hasta 6 hojas, lo que supone la posibilidad de una superficie acristalada de hasta 18 m². El sistema elevable evita cargas y fricciones que podrían, con el paso del tiempo, deteriorar los elementos móviles y existe la posibilidad de automatizar el sistema. La casa, como estimamos que se debe exigir, garantiza la estanqueidad en todo el perímetro y dispone de ensayos certificados según norma UNE-EN 1191:2001 que garantizan la resistencia y durabilidad. Sobra decir que todas estas perfilerías incorporan, al igual que en el resto de aperturas, la ruptura térmica en sus perfiles.

Corredera GTi de Technal

Por último no podíamos dejar de lado el tema estético a la hora de elegir una carpintería. La mayoría de las carpinterías de las que hablamos han conseguido reducir considerablemente el tamaño de los perfiles, si perder por ello capacidad de aislamiento térmico y acústico, y bastante más en el caso de las correderas elevables que en el de las oscilo-paralelas.

Además existe también la posibilidad de elegir como corredera una ventana de hoja oculta, con lo que se consigue mayor esbeltez. En este caso el diseño de los perfiles laterales evita el efecto bilama ya que la hoja corredera queda oculta detrás del marco. Este tipo de ventanas incorporan un sistema de cierre en el interior del montante del marco, no en la hoja como las correderas tradicionales, se evita así la posibilidad de forzar mediante palanca y además se dispone una línea de puntos de cierre sobre el montante oculto de la hoja que la hacen inaccesible desde el exterior. 

Sistema Lumeal de Technal


Ventilación del forjado sanitario

Mediante la correcta ventilación de un forjado sanitario conseguiremos eliminar la humedad y el gas radón que se acumula bajo el mismo.

El gas radón es un gas radioactivo generado por algunas rocas del interior de la corteza terrestre, que transportado por las capas del terreno, invade las viviendas a través de grietas y orificios de sótanos y subsuelos. En la atmósfera el gas radón se diluye en el aire, alcanzando bajas concentraciones, sin embargo en un espacio cerrado, como una vivienda, este puede acumularse alcanzando altas concentraciones y aumentando el riesgo de afecciones pulmonares. Una adecuada ventilación permite la expulsión a la atmósfera del gas radón y con ello el peligro que supone para la salud.

Ventilar un forjado sanitario permitirá también eliminar la humedad que se acumula bajo el mismo, evitando que por capilaridad se transmitan humedades al interior de la vivienda. Un ejemplo que nos muestra de forma evidente la necesidad de ventilar sería la diferencia entre colocar boca abajo un vaso recién lavado sobre una superficie lisa o sobre una superficie que permita una cierta ventilación, en el primer caso al no permitir la entrada de aire, las acumulaciones de humedad en las paredes interiores del vaso se mantendrán durante días, mientras que con un mínimo de ventilación el agua desaparecerá en poco tiempo.

 

Proponemos dos opciones para sacar al exterior el aire de bajo el forjado.

Opción 1, las salidas de ventilación se disponen en la fachada de la vivienda, instalando una malla aintiinsectos y rejillas que ocultan los tubos.

Opción 2, las salidas de ventilación se realizan a través de arquetas instaladas en el terreno, con tapa de rejilla para permitir la ventilación. Estas arquetas deberán estar conectadas a la red de recogida de aguas pluviales.

El área de los conductos de ventilación vendrá determinada por las indicaciones del CTE DB HS 1, para ello será  suficiente con la  ejecución de pases de diámetro 80/120 mm., en la proporción de uno cada 3,50/4,00 m. Los orificios de ventilación deberán que ser colocados preferiblemente a la cara sur de la edificación (cara más caliente) respecto de la cara norte (cara más fría) de modo que se genere una ventilación por tiro natural. En el caso que haya zonas del forjado separadas entre ellas por vigas de cimentación no perimetrales, será necesario conectarlas entre sí mediante pases similares a las salidas exteriores.

 


La geotermia como fuente de energía renovable

Con la publicación en el DOGA nº 204, de 22 de octubre, Instrucción 6/2010, de 20 de septiembre, de la Dirección General de Industria, Energía y Minas, las instalaciones que emplean bombas de calor geotérmicas para la producción de calefacción, agua caliente sanitaria y/o refrigeración podrán ser consideradas como instalaciones que emplean fuentes de energía renovables.

De este modo queda resuelto el problema que surgía al realizar este tipo de instalaciones, puesto que hasta el momento, al no ser considerada la geotermia como una energía renovable,  el Código Técnico de la Edificación en su Documento Básico de Ahorro de Energía, Sección HE 4 ”Contribución solar mínima de agua caliente sanitaria” nos obligaba a la instalación de paneles solares o algún otro sistema que justificase el ahorro energético requerido. Por ello, actualmente los sistemas más habituales empleados en vivienda que jusifican el cumplimiento del CTE DB HE 4 son:

  • Paneles solares térmicos
  • Biomasa
  • Geotérmica
  • Paneles solares fotovoltaicos
  • Microgeneración de electricidad

Si bien no recomendamos la microgeneración de electricidad en vivienda unifamiliar, puesto que los trámites administrativos para la venta de la electricidad a la compañia suministradora son complejos y la energía eléctrica generada ( Dachs 5,5 Kw) es superior a necesaria para el funcionamiento habitual de la vivienda, resultando dificil rentabilizar la inversión.