Profundidad piscina


La profundidad del vaso de agua de una piscina estará determinado por el uso que se le pretenderá dar, una profundidad excesiva dificultará su uso y encarecerá el mantenimiento.

Las profundidades más habituales para la piscina de una vivienda unifamiliar suelen ser:

·        20 cm, zona para situar tumbonas en el interior del agua, esta disposición mejora la sensación térmica en días muy calurosos.

·       40 cm, zona de juego para niños pequeños y descanso para adultos. La baja profundidad contribuye a incrementar ligeramente la temperatura del agua en esta zona, generando una atractiva zona de relax y permitiendo que la piscina pueda ser utilizada por niños de corta edad.

·        80/90 cm, zona infantil, esta profundidad permite que los niños hagan pie y puedan disfrutar de la piscina.

·     120 cm, una altura que permite el uso familiar como zona de juegos y chapoteo.

·        140/160cm, esta altura es ideal para la práctica de la natación.

Lo habitual es que el fondo del vaso de la piscina presente inclinación para poder facilitar distintos usos en la misma piscina, asimismo, esta inclinación facilitará la limpieza del fondo y el desagüe.

En la última propuesta que hemos presentado para una vivienda en Coirós, se propone una zona de playa con una dimensión de 140×250 cm. y un vaso de fondo en pendiente con una profundidad variable de 80 a 150 cm, esta disposición permite el uso de la piscina por todo el mundo.